5 Pasos para Vender una Vivienda Heredada
en la mayoria de los casos
Paso 1: Aceptar la Herencia
El primer paso para vender un piso heredado es que figures como propietario del inmueble en el Registro de la Propiedad. Es decir, para poder poner a la venta, alquilar o realizar cualquier operación con el inmueble, previamente los herederos tienen que haber aceptado la herencia ante notario.
Si la vivienda que quiere ponerse a la venta existe varios herederos, estos tendrán que firmar el documento de partición de la herencia en conformidad con lo que establece el testamento, para legalmente poder venderla.
Paso 4: Documentación al Registro de la Propiedad para hacer el cambio de nombre
En este momento vas a tener que presentar el Certificado de defunción que certifique la muerte del testador, el Certificado del Registro de Actos de Última Voluntad, que establece si existe testamento escrito y cuál es su última versión, y finalmente, la documentación que acredita el pago de los impuestos, tanto el de sucesiones como la plusvalía municipal.
Paso 2: Pago de Impuesto de Sucesiones y Donaciones
Para convertirte legalmente en el propietario del piso heredado, tendrás que asegurarte de haber liquidado las deudas y haber pagado los impuestos correspondientes para la transacción.
El plazo para liquidar este impuesto es de 6 meses desde el momento del fallecimiento y hay que abonarlo a la Agencia Tributaria de la localidad donde el difunto tuvo su última residencia habitual.
Si se solicita en los primeros 5 meses, es posible prorrogar el pago de este impuesto hasta otros 6 meses más.
Paso 5: Vender la casa heredada
Te aconsejamos que realices la venta en el primer año de haber recibido la herencia, con el objetivo de evitar volver a pagar la plusvalía municipal.
Además, ten en cuenta que la venta de un inmueble está considerada una ganancia patrimonial y está gravada sobre el IRPF. Así que no te olvides de incluir el pago de este impuesto en la declaración de la renta del próximo año.
Paso 3: Plusvalía municipal
Otro impuesto que habrá que tener en cuenta es la plusvalía municipal o el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los terrenos de naturaleza urbana. Este tributo es competencia de los ayuntamientos y se aplica cuando se vende, dona o se hereda una vivienda.
La plusvalía municipal tiene el objetivo de gravar lo que se ha revalorizado el piso, desde el momento de la compra, hasta que se realice la venta.